IGLESIA
PARROQUIAL
Bajo la advocación de El Salvador, al igual
que la Catedral
de Ávila, a cuya diócesis perteneció hasta mediados del siglo XX.
En el lado norte cuenta con una entrada
cobijada por un bello pórtico plateresco realizado a principios del siglo XVI, y
cuya construcción debió ser patrocinada por el segundo Conde de Oropesa, pues
en el exterior figuran las armas heráldicas de los Álvarez de Toledo, junto a
las cinco hojas de higuera propias del apellido Figueroa de su esposa doña
María de Figueroa y Toledo. La puerta de arco rebajado con dos arquivoltas, con
finas columnas con basamento y capitel y decoración de perlas o bolas, muy
propio del gusto ojival de la zona y abulense de finales del siglo XV y
principios del XVI, es simétrica a la puerta del sur, que quedo como entrada a
una capilla que se construyo posteriormente.
En 1806 se levanto su airosa torre, que en la
parte baja sirve de acceso al templo, por una nave con bóveda de cañón
denominada popularmente la calleja.
Es templo de tres naves, caso único en la comarca,
con crucero y ábside plano. La nave principal, de mayor altura que las
laterales, se separa de estas por medio de cuatro arcadas que apoyan sobre
pilastras octogonales y estas sobre fuertes basamentos. El coro ocupa el tercer
tramo de las naves y esta formado por fuertes arcos rebajados que apoyan sobre
columnas, de las que las traseras fueron cegadas al construir la torre en 1806.
En el pielero capilla del Baptisterio. En el lado de la epístola se encuentra una capilla a la que se
accede por la que fue puerta sur.
Retablo Mayor
De estilo barroco es obra hecha para
el hueco del ábside. Tiene tres calles divididas por intercolumnios y se
encuentra coronado por un cuadro y una talla en forma de sol del Salvador. En
el destaca un crucifijo de buena talla.
Retablo de Santa Catalina
Situado en la cabecera del lado de la epístola, es un
retablo barroco similar al del lado del Evangelio. Distribuido en tres calles
con intercolumnios. Preside este retablo una talla muy preciosista, al parecer
salida de las diestras manos de Salvador de Carmona que representa a Santa
Catalina de Siena, Doctora de la
Iglesia.
Salvador Carmona (Navas del
Rey-Valladolid 1708- Madrid 1767) Escultor barroco con incipiente tendencia al
neoclasicismo. Sus tallas religiosas estuvieron casi circunscritas a Madrid,
donde muchas desaparecieron en la Guerra Civil. Son salidas de sus manos, muchas de
las estatuas de los Reyes de España (1750-1753) destinadas para coronar El Palacio
Real de Madrid y que hoy embellecen muchos jardines de la capital y de otras
provincias. Son también suyas las esculturas de San Isidro y Santa María de la Cabeza que hay bajo
hornacinas en el Puente de Toledo de Madrid.
Junto a este retablo hay un gran
cuadro que representa a Santo Domingo de Guzmán, fundador de la Orden de Predicadores e
instaurador del Santo Rosario. Fue donado por don Jacinto Rubio, Calificador
del Santo Oficio. Está coronado por un frontal con volutas y escudo de La Santa Inquisición y cruz de
Calatrava, de la que a buen seguro el donante era Caballero.
Cuadro de El Salvador
Se encuentra por encima de la puerta
de la sacristía. Es un magnifico óleo, recientemente restaurado de estilo
flamenco del siglo XV. Tal vez formo parte de un Retablo Mayor más antiguo.
Ermita de los Santos Mártires
Situada al oeste de la villa esta bajo la advocación
de San Sebastián (mártir) y San
Fabián (papa). Construida en
mampostería y aparejo toledano.
Calvario
Museo Municipal Marcial Moreno Pascual
Instalado en una casa de pudientes
labradores, del siglo XIX, que conserva la tipología tradicional de la Casa Lagarterana. Amplio patio
con acceso desde la calle, acceso a la vivienda, cocina e instalaciones
destinadas al ganado de labor (estas últimas, en este caso, son hoy
dependencias de uso museistico o cultural).
La planta baja de la vivienda, se
distribuye como todas las casas lagarteranas de antaño, en Portal y Sala y las
habitaciones a los lados de estas.
PORTAL
Es la habitación por la que se accede
desde el patio. Su decoración se realiza a base de cerámicas, platos
principalmente, entre las que destacan las de Puente del Arzobispo y Talavera
de la Reina,
pero habiendo también de Manises y de Cataluña.
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Destaca la denominada Cantarera, con platos distribuidos en
arcos. La Espetera
de donde cuelgan objetos de cobre de uso del hogar. Por encima de las
puertas las llamadas Porteras cuadros
de mas anchura que el vano de la puerta tapizados con telas de percal francés. Colgado de la puerta por
la que se accede a la sala un Pañomano (especie de toalla profusamente
decorada con bordados lagarteranos).
SALA
Decorada con cuadros religiosos, en su mayoría reproducciones litográficas (laminas), espejos de claro estilo
barroco y cuadros pintados en cristal.
DORMITORIO
En un de los dormitorios se exhibe una
cama de las denominadas Colgadas, con
mantas tradicionales de los telares lagarteranos denominadas de Picaos.
SALA DE LOS TRAJES LAGARTERANOS
Donde se muestran los diversos trajes
tradicionales de Lagartera, tan ricos y populares y algunas labores de
bordados.
La parte alta del edificio se destina a
la exposición de las pinturas del pintor lagarterano Marcial Moreno Pascual,
que el dono a su pueblo. Estas constituyen el mejor patrimonio etnográfico de
Lagartera, ya que este pintor, supo con su genial pincel, plasmar todas las
costumbres y tradiciones de esta villa toledana.
Marcial Moreno Pascual, nació en Lagartera el 28 de septiembre de 1911, en el seno de una familia muy humilde. Desde niño sobresalió por su habilidad en el dibujo, que realizaba en las paredes encaladas con trozos de picón.
Siendo un adolescente, Marcial, pudo admirar la destreza de grandes pintores que llegaban a Lagartera atraídos por su tipismo, en especial el modo de vestir de sus mujeres, como Ramón Zubiaurre, Eduardo Chicharro... y toma conciencia del interés plástico que ofrecen las estampas costumbristas de sus paisanos.
En 1927 visita Lagartera el aparejador don Alberto Garriga, con el fin de actualizar el catastro urbano de la villa. Después de ver las grandes posibilidades artísticas del joven Marcial Moreno, convence a sus padres de la conveniencia de que este estudie y perfeccione su pintura. Lo que hará el lagarterano primero con el escultor Victorio Macho y luego con el pintorm extremeño Eugenio Hermoso.
Durante la década de los treinta Marcial perfecciona las técnica de su pintura y gana diversos premios nacionales que le catapultan a la fama. En este periodo pinta tipos de su pueblo, incluso cuando hace algunas composiciones para optar a premios o encargos de algunas instituciones, siempre toma modelos lagarteranos.
En plena efervescencia de su fama, Marcial recibe una beca de la Real Academia de San Fernando para poder pintar y estudiar en Estados Unidos, y junto con el arquitecto Fernando Chueca Goitia, que obtuvo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid una beca de la Fundación Conde de Cartagena para ampliación de estudios en Norteamérica. ambos residen juntos en 1951 en un departamento de Nueva York. Marcial contrajo matrimonio con Frida Rummier, nacida en Turquia e hija del embajador alemán ante la republica Turca.
Permanecio este ilustre lagarterano viviendo en Estados Unidos hasta su fallecimiento el 17 de diciembre de 1983 en Manhattan. En sus mas de treinta años de vida en aquel país, Marcial moreno Pascual pinto gran numero de cuadros destinados a instituciones católicas. Hizo gran numero de retratos a financieros, en particular, a miembros del colectivo judío.
Marcial Moreno Pascual, nació en Lagartera el 28 de septiembre de 1911, en el seno de una familia muy humilde. Desde niño sobresalió por su habilidad en el dibujo, que realizaba en las paredes encaladas con trozos de picón.
Siendo un adolescente, Marcial, pudo admirar la destreza de grandes pintores que llegaban a Lagartera atraídos por su tipismo, en especial el modo de vestir de sus mujeres, como Ramón Zubiaurre, Eduardo Chicharro... y toma conciencia del interés plástico que ofrecen las estampas costumbristas de sus paisanos.
En 1927 visita Lagartera el aparejador don Alberto Garriga, con el fin de actualizar el catastro urbano de la villa. Después de ver las grandes posibilidades artísticas del joven Marcial Moreno, convence a sus padres de la conveniencia de que este estudie y perfeccione su pintura. Lo que hará el lagarterano primero con el escultor Victorio Macho y luego con el pintorm extremeño Eugenio Hermoso.
Durante la década de los treinta Marcial perfecciona las técnica de su pintura y gana diversos premios nacionales que le catapultan a la fama. En este periodo pinta tipos de su pueblo, incluso cuando hace algunas composiciones para optar a premios o encargos de algunas instituciones, siempre toma modelos lagarteranos.
En plena efervescencia de su fama, Marcial recibe una beca de la Real Academia de San Fernando para poder pintar y estudiar en Estados Unidos, y junto con el arquitecto Fernando Chueca Goitia, que obtuvo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid una beca de la Fundación Conde de Cartagena para ampliación de estudios en Norteamérica. ambos residen juntos en 1951 en un departamento de Nueva York. Marcial contrajo matrimonio con Frida Rummier, nacida en Turquia e hija del embajador alemán ante la republica Turca.
Permanecio este ilustre lagarterano viviendo en Estados Unidos hasta su fallecimiento el 17 de diciembre de 1983 en Manhattan. En sus mas de treinta años de vida en aquel país, Marcial moreno Pascual pinto gran numero de cuadros destinados a instituciones católicas. Hizo gran numero de retratos a financieros, en particular, a miembros del colectivo judío.
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